Con la subida del IVA el consumo de las familias ha descendido aún más si cabe. A la grave situación de crisis económica de nuestro país se le han sumado factores como el desempleo o un aumento de precios que hacen difícil que los españoles retomen los hábitos de consumo que tenían antes de que estallase la burbuja. El sector del calzado es uno de los que más se está resintiendo, especialmente en grandes ciudades como Madrid, donde los comercios pequeños apenas pueden competir con los precios de las grandes franquicias. Los minoristas deben hacer frente a unos gastos todavía mayores que los de las grandes marcas y además conseguir que esto no repercuta en el precio de sus productos para resultar también atractivos para los consumidores.
Dentro del sector del calzado, una especialidad en la que se están notando realmente los efectos de la crisis pero de una manera positiva es en las zapaterías de arreglos. Muchas son las personas que quieren sacar partido a la inversión que hacen, por ejemplo, en unas botas, y van a que les arreglen la piel de las mismas o las cremalleras. Las tapas son también una buena opción para aquellos que desean alargar la vida de sus zapatos. Más difícil lo tienen otras personas con algún calzado especial para poder repararlo, como por ejemplo sucede con las zapatillas para running o el calzado infantil, que muchas veces es necesario cambiarlo por el crecimiento de los niños antes de que nos dé tiempo de arreglarlo.
Pero existen trucos para poder llevar mejor esta subida de precios y la crisis en general y no renunciar a estrenar zapatos. Como decíamos, las grandes superficies ofrecen precios muy competentes, así como algunas franquicias. En las tiendas del centro de la ciudad se pueden encontrar zapatos básicos más baratos a veces que ponerle tapas a los nuestros, de forma que renovarlos nos sale más económico que aprovechar lo que ya tenemos.
Las tiendas online como Deportes Evolution o BillowyShop son también una buena forma de ahorrar en la compra de zapatos, así como otro tipo de productos. En parte, este menor gasto se debe a que no existen tantos intermediarios, pero debemos contar con la posibilidad de poder cambiarlos o devolverlos si no son de nuestra talla o si no es lo esperábamos tras ver las imágenes por Internet, así que debemos informarnos acerca de si podemos hacer este tipo de operaciones y si tienen algún coste adicional. Pero la red tiene también muchas ventajas. En ella encontramos a veces el tipo de calzado que no podemos ver en todas las tiendas porque es menos común, como el de caña ancha o para pies anchos, así como tallas especiales o incluso hecho medida.
Por último, para los que residen en Madrid concretamente hay una opción para comprar zapatos de calidad y a muy buen precio. Se trata de hacer una visita al pueblo toledano de Fuensalida, que está muy cerca de Madrid. Una mañana, una tarde o cualquier ratito libre que tengamos del fin de semana podemos acercarnos a este pueblo manchego conocido por su industria del calzado, que se ha convertido en su principal motor económico.
La avenida del Cristo del Amparo o de los zapatos concentra una gran cantidad de tiendas con todo tipo de ofertas, desde calzado para bodas con sus bolsos a juego en el caso de las señoras, hasta manoletinas de todos los colores y formas, así como zapatos de grandes marcas. Todos ellos cuentan con enormes descuentos que hacen atractiva la visita para el consumidor. Lo que se gasta en gasolina se hace rentable con solamente comprar un par de zapatos, aunque lo normal es salir con varias bolsas. Y es que los precios de los outlets y de los almacenes son extremadamente competitivos a vista del cliente, quien puede encontrarse con hasta la mitad de descuento del precio original en las tiendas de la ciudad. Geox, Pablosky, Mustang, Xti… En Fuensalida, además de variedad de marcas, hay también variedad de modelos. Es un lugar para hacer compras para toda la familia, desde padres hasta niños, incluidos los jóvenes y los abuelos, así como para todas las ocasiones, ya que podemos encontrar desde zapatos de etiqueta y de vestir hasta los más sport.
Llegar a este pueblo toledano es también muy sencillo. Para ir en coche desde Madrid hay que coger la carretera A5, también conocida como carretera de Extremadura, con dirección a Talavera, y desviarse para Santa Cruz de Retamar. Eso sí, hay que tener en cuenta que no somos los únicos que iremos en busca de las ofertas, así que es mejor planificar la visita y también hacerse una idea antes de qué vamos buscando, ya que si no podemos caer en un consumo compulsivo animados por los precios.