De qué forma se puede elegir una asesoría fiscal y contable para autónomos. Bueno, debemos comenzar por el principio, pues se puede contratar gracias a una cuota mensual que se debe ver no como un gasto, sino como una inversión en tiempo, dinero y también en tranquilidad.
Nuestra experiencia y los propios errores que se cometen, hacen que debamos dar un consejo a los emprendedores…
“Si se comienza un proyecto de empresa como trabajador freelance, ten siempre el respaldo de una asesoría profesional”.
Pensemos que a nivel legal, como nos dicen los expertos de luygo.com cada día sale legislación nueva, por lo que los cambios se realizan cada vez con mayor frecuencia y solo los asesores profesionales son los que van a ser capaces de estar al día. Vamos con algunas de las obligaciones legales, contables y fiscales.
Libros contables validados
En ellos se va a recoger toda la información relativa a las operaciones que resulten de las compras y ventas en un periodo concreto o sobre las inversiones que se realicen.
Declaraciones fiscales
En este sentidos los autónomos como tal están obligados a presentar las declaraciones fiscales, trimestrales y anuales del IVA y del IRPF y en el caso de que tengan alquileres, trabajadores o profesionales que subcontraten, cada trimestre van a tener que abonar las pertinentes retenciones de cotizaciones sociales que practiquen, registros horarios, información sobre las retribuciones, etc.
Cumplimiento de los imperativos de la Ley de Protección de Datos
El tiempo que se dedique a la elección de un asesor de calidad es algo que va a merecer la pena siempre. Hablamos de que el va a ser tu fiel compañero en tu travesía empresarial, por lo que es conveniente tener seguridad en que desde un primer momento se va a realizar una magnífica elección.
Existen bastantes buenos profesionales, pero otros también no lo son tanto y es necesario que se distingan cuanto antes mejor.
Vamos con algunos consejos de utilidad si estás buscando tu asesoría:
Es bueno pedir una serie de presupuestos de tal forma que se pueda compararlos y recibirlos de forma escrita en el correo. Los presupuestos tienen que indicar los servicios que se van a recibir, la forma de pago, si el coste será fijo o de si dependerá de los apuntes contables, la cantidad de facturas, etc.
Solicita a la asesoría que te proporcione referencias de la clientela, por lo tanto de autónomos y Pymes a los que lleven los impuestos y la contabilidad. En el caso de dudas, lo mejor es llamar con cortesía a los clientes de cara a preguntarles si están satisfechos con el asesoramiento recibido.
Una asesoría de calidad no va a tener problema alguno en facilitar referencias y en el caso de que se encuentren satisfechos seguro que te van a recomendar su asesoría.
Debes valorar siempre la posibilidad de que te puedan ofertar una serie de opciones de comunicación, las cuáles pueden ser un contacto personalizado, el cuál puede ser por vía telefónica o por correo electrónico.
Una buena opción es que se le permitan estas formas de contacto:
En persona: si necesita acudir al despacho del asesor para poder plantear algún asunto que sea complejo. Por vía telefónica, como el sistema mayor agilidad para las consultas de manera puntual y por correo electrónica como manera habitual de envío y recepción de la documentación que se haya digitalizado.
Administración electrónica y sin necesidad de desplazamientos
Muchas de las asesorías profesionales hacen la presentación electrónica en nombre de los impuestos ante la Agencia Tributaria, o mediante la presentación de las cuentas anuales en el Registro mercantil.
Hablamos de que es toda una garantía para ti. Debes desconfiar en el caso de que no te lo ofrezcan a ti.
Bastantes asesoría hasta cuentan con web propia que tiene acceso al área de clientes para poder ver cómo se encuentra su contabilidad, la presentación de impuestos. Hablamos de alg que no es fundamental, pero que puede tener bastante utilidad.
Asesoría integral
Que sea para lo legal, fiscal o contabilidad. Probablemente no la necesites al inicio, pero piensa que además de la contabilidad o los impuestos, tu asesor deberá poder gestionar todo lo que será relativo a contratar personal en el caso de que en un futuro tengas a mucha gente trabajando para ti.
No solo el contrato, además deberás pedir siempre la factura oficial de los servicios que preste la asesoría. Hablamos de algo que es posible que pueda parecer algo obvio, pero es mejor asegurarse de que emitirán factura por la totalidad de servicios que se reciban.
Todo ello va a permitir que te deduzcas los horarios del asesor como un gasto deducible y va a respaldar la relación profesional que el asesor tenga contigo.
Ley de Protección de Datos personales
El asesor la tiene que cumplir y formar en el documento de conformidad y confidencialidad, pues va a tener el acceso a la información de carácter financiera del negocio y de forma indirecta a algunos de los datos de la clientela.
Envío cada mes de la documentación
Pese a que los impuestos se pagan cada trimestre, deberás acordar que el tienes que enviar cada mes la totalidad de documentación que se genere. Debido a nuestros años de experiencia, queda claro que el enviarlo todo antes de los diez días de la fecha límite de presentación de los impuestos se lo pone más complicado al asesor para que haga bien su labor, pues esos días suele estar lleno de trabajo con la totalidad de clientes que estén rezagados.
Piensa que ahora existen algunos tipos de tributación donde es obligatorio que se presenten de forma instantánea las facturas vía canal telemático.
Información debidamente actualizada
Bastantes asesores profesionales lo que hacen es enviar a los clientes boletines en papel o electrónicos con las últimas novedades en el campo fiscal, contable y en lo laboral. Hablamos de que es una magnífica manera de estar al día y que se pueda comprobar que el asesor también lo estará.
¿Cuánto va a costar una asesoría?
Esta es una pregunta muy habitual, lo mismo que pensar si va a merecer la pena dicho gasto. El autónomo que tenga una facturación sencilla debe tener los servicios completos de una asesoría por unos 60 euros al mes y como es natural algunos más altos, pero esta es la media. Eso sí, piensa en ello como una inversión.
No solo se trata de cumplir con la ley, un buen asesor además debes tener claro que te va a permitir:
Se evitan sanciones y los posibles recargos que puedan caer por parte de la Agencia tributaria o que se hagan por parte de la Agencia Tributaria o la Seguridad Social al incumplir una serie de obligaciones.
El ahorro de costes, puesto que los asesores no solo van a preparar los diversos impuestos, también tiene que ayudar a tomar la decisión de cómo se puede pagar menos mediante el sistema de deducciones y de amortizaciones, ayudando a seleccionar los tipos de triburtación y de contratación que puedan tener mayores beneficios.
Bastantes autónomos no piensan más opciones de las que les puede indicar la Agencia tributaria, pero si que existen las maneras de poder optimizar al máximo del pago de los impuestos siendo siempre respetuosos con la ley.
Se gana tiempo y también concentración para el negocio
En este sentido, el que se lleve la contabilidad y la fiscalidad al día te va a permitir estar la más de tranquilo y concentrarse en lo que mejor sepas hacer, tu propio negocio. Además te va a permitir dar una imagen de mayor profesionalidad a la clientela, proveedores o a la entidad financiera cuando se visite para presentarles un proyecto o a pedirles financiación.